El que podríamos denominar como sector antitaurino cuenta con una imaginería, que utiliza siempre que las circunstancias se lo permiten. Las camisetas, desde hace mucho tiempo, fueron utilizadas con fines comunicativos y propagandísticos. Se trata de imágenes esquemáticas con algún mensaje explícito, corto y generalmente, falso o falaz.
En este caso se trata del manido truco de identificar una luctuosa y execrable actividad humana, como la tortura, con la de una práctica legal y que nada tiene que ver con ella. En este caso, si observamos bien, se trata de un extraño animal de tres patas, con más parecido a un bisonte americano que a un toro de lidia, con cierto aire de dragón expulsando fuego por las fosas nasales. Un poco más en serio, desde el punto de vista plástico, la imagen es extraordinariamente pobre.
La fotografía fue hecha en el Rastro, Madrid.
La frase en cuestión es refrendada por el que estas líneas escribe y por cualquier taurino, claro que la tortura no es arte ni cultura. Totalmente de acuerdo. Pero es que la tortura, evidentemente, no tiene nada que ver con la Tauromaquia.
Vaya por delante mi respeto hacia quienes pierden el tiempo así y a las personas que tienen tan mal gusto de comprar estas camisetas y ponérselas. Me pregunto qué tal quedaría un pollo torturado o una gamba...en una camiseta con algún lema parecido a éste.
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