Hay personas que no son capaces de distinguir conceptos tan importantes como asesinato, tortura o genocidio. Utilizan muy mal vocabulario para intentar argumentar sus sentimientos antitaurinos. Basta una mirada a las pintadas, pegatinas, carteles y textos que se pueden ver por doquier para comprobarlo. Es verdaderamente grave que se asemeje un asesinato con la muerte de un animal. Y si pensamos en el término genocidio la desproporción es abismal y nauseabunda. Podemos comparar el genocidio judío de la II Guerra Mundial con lo que ocurre en una plaza de toros y ver que hay quiénes, sintiéndose progresistas y avanzados y humanitarios, se quedan tan anchos.En fin, una verdadera pena, un insulto y una muestra de los nulos fundamentos de los críticos con las corridas de toros. Por cierto que lo más sabio es no hacer ni caso, ignorarlos por completo.
En la fotografía, pintada en Piedrabuena, Ciudad Real (Carretera de Navalpino, en el casco urbano) que lleva años ya. PECTA (Patriotas Españoles Contra la Tortura Animal) parece que tiene que ver con PETA (People for the Ethical Treatment of Animals), nada que añadir de lo ya dicho.
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